
¿Quieres conocer una de las razones más subestimadas – y letales – que llevan a la destrucción de negocios?
- No es la falta de encaje producto/mercado.
- No es la escasez de capital.
- Ni siquiera es una mala ejecución.
- Es la soledad.
- ¿Sorprendido? Deberías prestar más atención. Aunque las causas aparentes pueden variar, hay un patrón recurrente: emprendedores y dueños de negocios tomando decisiones estratégicas y cruciales completamente solos.
Escenario típico:
- Surge una decisión crítica (¿pivotar? ¿levantar capital? ¿reducir el equipo?).
- Dudas en compartir tus inseguridades por miedo a parecer débil.
- Buscas consejos superficiales de personas que nunca han estado en la línea de fuego.
- Actúas basado en suposiciones y sesgos inconscientes.
- Y te das cuenta del verdadero costo de esa decisión… cuando ya es demasiado tarde.
Mientras tanto, los emprendedores y empresarios de alto nivel actúan de forma distinta:
- No toman decisiones clave solos.
- Se rodean de asesores con experiencia, mentoría real y retroalimentación brutalmente honesta – justo cuando más lo necesitan.
- Acceden a la “inteligencia colectiva” que ninguno de nosotros podría acumular por cuenta propia.
Toma nota: una de las habilidades más descuidadas del emprendedor no es la visión ni la ejecución.
Es la capacidad de construir un círculo de confianza que te confronte con la verdad – antes de que lo haga el mercado.
Ahora detente y piensa:
- ¿Qué decisiones críticas estás enfrentando en el silencio de tu propia mente?
- ¿Cuál es el costo de seguir “operando” así?
En los negocios, el mayor riesgo no es fallar en la ejecución – es fallar en rodearte de las personas adecuadas que puedan desafiarte, orientarte y ayudarte a tomar las decisiones clave antes de que sea demasiado tarde.
Eso es todo.