¿Quieres evolucionar de verdad? Cambia tu entorno antes de cambiar tu estrategia. Porque, en el fondo, el nivel de tu desempeño es elevado o saboteado por el ambiente que te rodea.
Rodéate de personas que te hagan sentir vergüenza de quedarte en la mediocridad. Esta frase incomoda — y ese es justamente el objetivo. Estar cerca de personas que operan en un nivel más alto te obliga a crescer. Personas que ejecutan rápido, piensan en grande, exigen consistencia, cuestionan tus excusas y entregan resultados.
Lo contrario también es verdad.
Si solo te rodeas de quienes se quejan, procrastinan y viven en el “luego lo veo”… vas a normalizar la mediocridad.
Te parecerá aceptable estar cansado, ocupado y sin resultados al mismo tiempo. Vas a confundir actividad con progreso.
¿Qué provoca este tipo de entorno poderoso?
- Expone tus propias racionalizaciones.
- Te hace sentir vergüenza de sabotearte a ti mismo.
- Te muestra lo que realmente es posible y cuánto te estás quedando atrás.
No se trata de competir. Se trata de pertenecer a un entorno que no tolera tu versión promedio.
Reflexiona un momento:
- Haz un inventario de las cinco personas con las que más tiempo pasas. ¿Te empujan hacia arriba o te mantienen estancado?
- Busca espacios donde te sientas desafiado, no cómodo. La comodidad social es una trampa para quien quiere crecer.
- Acepta las críticas que duelen pero te liberan. El crecimiento no ocurre donde todos te aplauden.
¿Quieres salir de la mediocridad? Frecuenta a quienes no te dejarán quedarte cómodo en ella.
Eso es todo.
